Sabina 

nació el 15 de septiembre de 1926 en garwolin (lublin), polonia, en el seno de una familia ortodoxa. cuando garwolin fue incendiada durante los primeros bombardeos alemanes, la familia se dirigió a pie a varsovia, donde fueron hospedados por un conocido. sabina fue reclutada como mano de obra forzada para la construcción de caminos. la familia fue encerrada en el gueto donde los padres de sabina fueron fusilados en su presencia en una de las razzias. hacia fines de 1942, fue enviada en tren a treblinka. al arribar, escapó corriendo hacia el bosque. luego de ser asaltada sexualmente, fue rescatada por partisanos judíos que le proveyeron de alimento y abrigo por una noche. continuó vagando en el bosque hasta que consiguió llegar oculta en un camión a la casa de una vieja amiga, la señora szlukowska. en su casa se alojaban miembros de las ss. sin embargo, a espaldas de su marido, su amiga la ocultó en el chiquero durante todo el invierno. agotada por las condiciones insalubres, tomó la decisión de entregarse. pero szlukowska nuevamente la ayudó limpiándola, despiojándola y vistiéndola como polaca cristiana para que se entregase en un campo de trabajo cercano a varsovia. desde allá, fue transferida a las fábricas de armamento de spandau en las proximidades de berlín. con el aumento de los bombardeos en 1944, fue trasladada a otra fábrica de armamentos en los sudetes (república checa). la liberación vino de la mano del ejército ruso. sabina regresó a polonia buscando algún miembro sobreviviente de su familia. se reencontró con la señora szlukowska quien la instó a dejar polonia para evitar que la mataran los polacos. enfermó gravemente y fue internada en un sanatorio cerca de munich. restablecida su salud, la cruz roja contactó a una tía en buenos aires. la tía le escribió a la única hermana sobreviviente de sabina que estaba en parís. las hermanas se reencontraron. con los rumores de la guerra fría, decidió emigrar a argentina vía uruguay en 1947. entró a la argentina clandestinamente por concordia, pero fue interceptada por gendarmería y debió pasar un mes en una cárcel en concepción del uruguay. cuando finalmente llegó a buenos aires, comenzó a trabajar y a estudiar para maestra jardinera. una amiga le presento a sebastián medina, viudo con un hijo adolescente con quien se casó. no tuvo hijos. sabina falleció en enero de 2017.